Selänne, eterno en el Honda Center

La jornada de ayer de la NHL estuvo marcada por un momento para la historia. Por primera vez, la franquicia de Anaheim Ducks retiró el número de uno de sus ex-jugadores, Teemu Selänne.

Durante el verano de 2013, Selänne anunció con un vídeo que volvería una temporada más a vestir el jersey de los Ducks, pero que, pasara lo que pasara, sería su último año en activo. El 16 de mayo de 2014, tras la derrota de los suyos en el séptimo partido de la serie de semifinales de conferencia contra Los Angeles Kings, finalizaba la carrera deportiva del que ya, para casi todos, es el mejor jugador finlandés de todos los tiempos, con permiso de su ídolo de la juventud, Jari Kurri, quien no quiso faltar a la gran cita de Selänne.

Ayer, aprovechando el choque entre los Ducks y los Winnipeg Jets, equipo en el que debutó Selänne -aunque no es la misma franquicia, pues los antiguos Jets son en la actualidad los Arizona Coyotes- la franquicia de Henry Samueli le brindó una ceremonia espectacular como homenaje a su trayectoria que, como dato curioso, se convirtió en el acto de retirada de un dorsal más largo de la historia de la NHL con una hora y media aproximada de duración, superando en unos 15 minutos la que los Rangers le hicieron a Messier en 2006.

Delante de las 17.356 personas que llenaron el Honda Center y de amigos, familiares y ex compañeros como Niedermayer, Saku Koivu, Giguere, quien le dedicó un breve pero intenso discurso, Parros y Pronger -no estuvieron Paul Kariya, de viaje familiar, ni Randy Carlyle, por el fallecimiento de un familiar- Selänne, acompañado de su mujer e hijos, presenció el momento en el que el gigante banner con su nombre y su número ascendía hasta lo más alto del lugar para quedar inmortalizado. Antes, ‘The Finnish Flash’ conmovió a todos los presentes con un discurso en el que repasó su carrera deportiva, mencionando y agradeciendo también a los San Jose Sharks y Colorado Avalanche, y nombrando a su antiguo agente, el fallecido Don Baizley, quien fuera su “padre americano”. Una silla permaneció vacía en su honor.

Teemu Selänne comenzó a jugar al hockey en EPS, aunque se formó en la cantera de Jokerit, a la que accedió en 1986. Un año después, debutó con el primer equipo, que por aquel entonces estaba en la I divisioona, conocida como Mestis en la actualidad -segunda división-, y en las categorías inferiores de la selección finlandesa. En el verano de 1988, Selänne fue seleccionado en el décimo puesto de la primera ronda del Draft por los Winnipeg Jets, aunque hasta 1992 no daría el salto a la NHL, consagrado ya a nivel europeo.

En su primer año en la NHL, Teemu Selänne consiguió una marca que, dicho anoche por el propio Gary Bettman, “nadie jamás conseguirá superar”, y es que el por aquel entonces rookie anotó la escalofriante cifra de 76 goles, destrozando todos los registros previos de novatos en la liga. El techo de un rookie estaba en los 53 goles de Mike Bossy. Un total de 132 puntos le concedieron el Calder Memorial Trophy como Rookie del Año.

Durante la temporada 95-96, Selänne fue traspasado a los Mighty Ducks of Anaheim por unos Winnipeg Jets en una situación económica catastrófica. Aunque le aseguraron que no sería traspasado, durante un entrenamiento, y sin previo aviso, le comunicaron una noticia que, por aquel entonces, le sentó como un jarro de agua fría, pero que, con el tiempo, acabó convirtiéndose en un hecho crucial para el transcurso de su exitosa carrera. En 1998 ganó el Maurice Richards Trophy como máximo goleador de la temporada y fue el máximo anotador de los JJOO de Nagano, en los que se hizo con el bronce con Finlandia. Con otro Maurice Richards bajo el brazo, Selänne aterrizó en 2001 en los San Jose Sharks y en 2003, gracias a una cláusula anti-traspasos, bloqueó su salida hacia los New Jersey Devils, pues en verano quiso unirse a Paul Kariya en los Colorado Avalanche en la que se puede catalogar como única temporada mala de su carrera debido a una lesión de rodilla que le llevó al quirófano y que casi acaba con su carrera. El lockout de 2004-2005 le vino de perlas para recuperarse, pero sólo en un lugar seguían confiando en que aún fuera un jugador de primer nivel: Anaheim.

Como agente libre, Selänne firmó con sus Ducks por sólo un año, ya que las dudas sobre su estado físico seguían estando ahí, pero sus 90 puntos, incluyendo el número 1000 en su carrera, y su actuación en los JJOO de Turín, en los que volvió a ser el máximo anotador y ganó la plata olímpica, despejaron todo tipo de dudas. En 2007 llegaría el momento más importante de su carrera deportiva. Tras otra espectacular temporada, Selänne y los ya Anaheim Ducks levantaron su primera Stanley Cup. El delantero finlandés, consciente de que, a pesar de todo, no volvería a estar en su mejor forma física, meditó su retirada, pero pasarían 7 temporadas más hasta que, ahora sí, el #8 confirmara su adiós con otro bronce olímpico y como el máximo anotador de la historia de los JJOO.

Pero Teemu Selänne no sólo fue el mejor jugador finlandés de la historia y uno de los mejores jugadores europeos de este deporte. ‘The Fantastic Finn’ es admirado más allá del hockey. Durante su discurso, mencionó la importancia que tuvo -y tiene- para él la comunidad del Orange County, pero es que Selänne no sólo es uno más de la comunidad desde su llegada a California. Allí es propietario de un restaurante y uno de los protagonistas en numerosos eventos sociales que se organizan cada año. Si te cruzas con él tienes prácticamente asegurados un autógrafo y un apretón de manos.

Por todo esto, un más que merecido homenaje de la NHL, los Anaheim Ducks y también de Territorio Hockey a ‘El 8’, Teemu Selänne