A diferencia de temporadas anteriores, los Playoffs en el Oeste han estado más baratos que en la Conferencia Este, aunque los líderes de división y la configuración de las eliminatorias no se han decidido hasta la última jornada.
El lado de la Central Division
#1 Dallas Stars vs #8 Minnesota Wild
10 años después, los Dallas Stars logran un título de división. El cambio de imagen de la franquicia en los dos últimos años ha sido espectacular y los de Texas han pasado de ser candidatos a una de las últimas plazas de Playoffs a ser una de las apuestas al título. Desde su llegada, Jim Nill arriesgó, tanto en el Draft como en la agencia libre y el trade deadline, y por el momento la jugada le ha salido a las mil maravillas. La pareja Seguin-Benn es el terror de toda defensa, aunque Tyler Seguin llega muy justo a esta primera ronda tras un corte en el tendón de aquiles. Spezza, Sharp y Hemsky aportan experiencia y equilibrio en las líneas ofensivas y Goligoski, Oduya y Klingberg estabilidad delante de Lehtonen y Niemi.
Minnesota vuelve a entrar vía wildcard tras un pésimo final de temporada y gracias a un final aún peor de Colorado Avalanche, su rival por esa última plaza de Playoffs. El despido de Mike Yeo sentó bien a un equipo con un talento infrautilizado y cuyo sostén han sido jugadores en teoría secundarios como Niederreiter y Erik Haula. Los Wild van a necesitar a los mejores Parise y Dubnyk, además de un paso al frente de sus dos mejores centers, Koivu y Granlund.
#2 St.Louis Blues vs #3 Chicago Blackhawks
Los St.Louis Blues volverán a tener delante a su bestia negra en Playoffs, Chicago Blackhawks, que defenderán el título de campeones. Las sensaciones en Missouri parecen ser mejores que años atrás y fruto de ello es que el equipo le ha peleado el liderato de división a los mejores Dallas Stars en mucho tiempo. Tarasenko es la principal baza ofensiva de un Ken Hitchcock que sabe que si vuelve a caer en primera ronda tendrá que ir a la cola del paro. Stastny, tras una primera temporada decepcionante, ha elevado su nivel y Brouwer y Fabbri han compensado el paso atrás de Lehterä. Shattenkirk, Pietrangelo y Parayko serán una amenaza desde la línea azul. Habrá que ver si Elliott es capaz de mantener su nivel a la hora de la verdad.
Los Blackhawks han completado un último tramo de temporada muy mediocre y, por momentos, vieron amenazada su 3ª posición. Patrick Kane, líder anotador de la liga con 106 puntos, y el rookie Artemi Panarin, con 77, son las razones por las que Chicago ha logrado mantener la tercera plaza. Bowman tuvo que moverse en el deadline para dotar de profundidad a la plantilla y logró traer de vuelta a Ladd, que sabe lo que es ganar la Stanley con Chicago. Muchos estarán pendientes de Jonathan Toews, capitán, al que se le ha echado de menos, y no es la primera vez, en tramos importantes de la temporada. Duncan Keith se perderá por sanción el primer encuentro de la primera ronda.
El lado de la Pacific Division
#1 Anaheim Ducks vs #7 Nashville Predators
En general, la temporada en la Pacific Division ha sido muy rara. Calgary y hasta Edmonton se llegaron a ver con opciones de playoffs mientras Anaheim deambulaba por la más absoluta mediocridad, maquillada por las buenas actuaciones de Andersen y Gibson. A mitad de temporada, los Ducks dieron con la tecla y el equipo empezó a carburar gracias a Perry, Kesler y un sorprendente Rickard Rakell, cuyos goles compensaron las vergonzosas actuaciones del peor Ryan Getzlaf que podemos recordar, aunque el capitán ha acabado con unos números “decentes”. Los Ducks llegan a Playoffs como uno de los equipos más en forma de la NHL, aunque con las posibles bajas de Gibson, Vatanen, Rakell, Perron, Bieksa y Pirri.
La gran temporada de los Predators puede resumirse con los números de Filip Forsberg y Roman Josi. Con ellos, además de Neal y el dominante Shea Weber, Nashville por fin cubre una de sus grandes lacras del pasado, la falta de anotación. Forsberg es un jugador con la capacidad de provocar un incendio en la defensa rival de la nada y el show de Roman Josi le dará votos para su candidatura al Norris Trophy, si bien no será el favorito. A todo esto hay que añadirle la notable mejoría de Pekka Rinne, que aunque no ha tenido su mejor temporada, ha sido capaz de retomar la regularidad que perdió el año pasado y que fue el factor clave por el que Nashville no entró en Playoffs. Los Predators van a dar guerra.
#2 Los Angeles Kings vs #3 San Jose Sharks
El duelo californiano es, sin lugar a dudas, uno de los grandes atractivos de la primera ronda. Ambos llegan bien y prometen espectáculo. En el caso de los Kings, su retorno a la post-temporada tras el estrepitoso fracaso de la temporada anterior llega con la pérdida en la última jornada del liderato de división que han acaparado durante casi todo el año. Aún así, Kopitar, Carter y Quick están en forma y con ellos el mejor Doughty, un Toffoli que ha terminado como el máximo goleador de la franquicia y un Milan Lucic que desde el primer momento se convirtió en una pieza imprescindible de este proyecto. Sutter ha sido capaz de sacarle un buen rendimiento hasta a Luke Schenn y el veterano Vinny Lecavalier, defenestrados en Philadelphia.
Por otra parte, los Sharks de DeBoer y Wilson han sabido moverse muy bien en el mercado y, aunque el equipo no posee la espectacularidad de aquel que ganó el Presidents’ Trophy en 2009, han recuperado una regularidad fundamental para sobrevivir en el Oeste. El incombustible Joe Thornton ha vuelto a marcarse otro temporadón junto a Joe Pavelski, y Hertl, Ward y Donskoi han suplido el bajón de Marleau y la ausencia de Couture. Y cómo no, Brent Burns, que con sus 75 puntos ha dominado la línea azul del Pacífico como ha querido. Mención también para Martin Jones, apuesta de Wilson para la portería, e incluso para James Reimer, cuyo traspaso fue criticado pero que en los 8 partidos que ha disputado ha sorprendido a absolutamente todos.
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