Se avecinan semanas turbulentas en Calgary tras los más que previsibles traspasos de Jarome Iginla, Jay Bouwmeester y quién sabe si alguien más. Una de las piezas jugosas que también podría cambiar de aires es el meta Miikka Kiprusoff, pero el finlandés no está dispuesto a ponerle las cosas fáciles a Feaster.Hace casi 5 años, cuando renovó por 6 con los Flames, Kiprusoff ya le comunicó al staff técnico y deportivo que no tenía pensado cumplir su último año de contrato. Pues bien, ese último año ya está aquí y Kipper no ha cambiado de opinión. Ya ha dejado claro que no va a reportar a ningún otro equipo en caso de ser traspasado y que, coincidiendo con el nacimiento de su hijo, puede volverse a Finlandia, en lo que suponemos que sería el final de su carrera NHL pero puede que no lo sea en el ámbito profesional, ya que lo lógico sería que se retirara en el equipo en el que se formó y del que posee buena parte, TPS Turku (es propietario del equipo junto con los hermanos Koivu).La noticia, evidentemente, no ha gustado en la franquicia, pues Miikka Kiprusoff podría haber sido una pieza de cambio muy importante de cara al trade deadline y a la reconstrucción de Calgary Flames
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