Pittsburgh Penguins y Washington Capitals volvían a verse las caras en Playoffs tras la semifinal de conferencia de 2009 que acabó con victoria en 7 partidos para los de Pennsylvania, que acabarían siendo los campeones de la liga ese año.
El siempre mediático duelo entre Crosby y Ovechkin se lo volvería a llevar el canadiense, aunque el protagonismo de la serie se lo llevarían otros jugadores.
Game 1: WSH 4-3 PIT (OT)
Final polémico para estrenar una de las series más esperadas de los Playoffs, ya que hasta después del partido no se pudo ver la toma en la que se despejaban todas las dudas sobre si el puck lanzado por TJ Oshie entró o no en la meta de Murray. Un final digno de un gran encuentro, justo lo que muchos esperaban de ambos equipos. Washington logró reponerse del empuje visitante que incluso les daría ventaja en el marcador y TJ Oshie, con un hat-trick, se convirtió en el héroe de la noche al darle el primer punto de la eliminatoria a los Capitals.
Game 2: WSH 1-2 PIT
El principio de la pesadilla capitalina comenzaría en el segundo partido. Matt Murray empezaría en el Verizon Center su recital ante el poderoso ataque local. Las líneas secundarias de Pittsburgh se pusieron el mono de trabajo y Eric Fehr, un ex-Capitals, sería quien anotaría el gol decisivo a falta de 4 minutos y medio para el final. Holtby evitó una derrota mucho más abultada.
Game 3: PIT 3-2 WSH
Cambio de escenario e inversión de roles. Pese al 1-1 en la eliminatoria, Pittsburgh fue el equipo que llevó la iniciativa ofensiva de ambos encuentros, así que, con la lección aprendida, los chicos de Trotz sabían que no podían dejarle a los Penguins el control del puck. ¿El problema? Jaleados por su público, los Pens salieron como un rodillo y a la media hora de juego ya ganaban por 3-0. En este preciso momento los Capitals, sin nada que perder con semejante marcador, se volcaron sobre la meta de un inconmensurable Murray, quien con 47 paradas logró mantener la ventaja para los suyos.
Game 4: PIT 3-2 WSH (OT)
Pese a la aparente igualdad durante toda la serie, con marcadores ajustados y varios partidos decididos en el tiempo extra, cada encuentro tuvo un dominador evidente, excepto este cuarto partido, quizás el que verdaderamente pudo caer para cualquier lado. Fueron los Penguins los que, en la prórroga, se llevaron el gato al agua con un gol de Hornqvist que daba a Pittsburgh una ventaja en la serie que para muchos ya era incontestable.
Game 5: WSH 3-1 PIT
Con el agua al cuello, otra vez, afrontaban los Capitals la vuelta al Verizon Center. Con más miedo a perder que otra cosa, Washington aprovechó su buen hacer en los equipos especiales para seguir con vida en la eliminatoria. Pittsburgh, con 3-1 en contra, tuvo ocasiones de sobra para empatar el partido, pero un Holtby descomunal hacía algo de justicia en el global de la serie.
Game 6: PIT 4-3 WSH (OT)
Apasionante guinda a un pastel que podría haberse alargado un partido más perfectamente. El encuentro fue muy parecido al tercero, con los Pens lanzados en los primeros compases del partido ante unos Caps que no reaccionaron hasta verse con el 3-0 en contra. Pero esta vez Murray no iba a evitar que Washington, con Mr.Clutch Williams como hombre destacado, igualara y llevara el choque a una nueva prórroga, la tercera en seis partidos. Como ya sabemos, en partidos así todo acaba reducido a detalles y en esto Pittsburgh fue mejor. Los Penguins no se achantaron, podían permitirse el pinchazo pese a que sería duro, y Nick Bonino cerró la serie para meter a los de Pennsylvania en la final del Este.
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