Chicago gana la Stanley en el último minuto

Anoche concluyó esta convulsa temporada. Tras un comienzo tardío y una mas que compacta temporada regular, llegaron los ansiados playoffs y su esperado ganador.

El Juego 7 parecía una certeza a poco más de un minuto para que terminase el partido. Boston se aferraba a su ventaja de 2-1 sobre Chicago, tratando desesperadamente de mantenerse vivos en la lucha por la Stanley. Pero los Blackhawks no estaban dispuestos a resignarse, anotando el gol del empate a los 1:16 para la finalización del tercer tiempo.

Esto parecía avocado al OT…¡SORPRESA! Chicago puso punto final a la temporada 2013 al anotar de nuevo 17 segundos más tarde. Boston no tuvo respuesta ante este soprendente desenlace, dando a los Blackhawks su segundo título en cuatro años.

Si te perdiste la remontada de locura de Chicago, esto es lo que pasó.

Antes de profundizar en los logros de Chicago, vamos a pararnos y pensar acerca de lo que ha sido esta serie Final Copa Stanley. De múltiples prórrogas a remontadas locas y grandes ofensivas por ambos partes, esta serie ha tenido de todo. Algunos pueden estar un poco decepcionados porque esta final no ha llegado a los 7 partidos, pero la finalización de este final de temporada ha sido uno de los finales más increibles vistos en bastante tiempo.

Ya hemos hablado de Chicago debido a sus logros en la temporada regular. Los Blackhawks estuvieron intratables en la temporada regular y terminando el año como el mejor equipo de la NHL, ganando Trofeo de los Presidentes.

LAS CLAVES:

El exito se extiende a toda la plantilla. Ha sido una victoria trabajada desde el colectivo. Los Blackhawks han gozado de una efectividad ofensiva de una gran cantidad de jugadores y una estabilidad en la porteria cuando más importaba.

Ofensivamente,  Patrick Kane (19 puntos), Jonathan Toews (14 puntos), Patrick Sharp (16 puntos) y Marian Hossa (16 puntos) como grandes contribuyentes. Pero para ganar una Stanley se necesita algo más que sus estrellas  y eso es exactamente lo que sucedió en el caso de Bryan Bickell. El delantero tuvo un playoffs para recordar. En 48 partidos de temporada regular Bickell anotó 24 puntos. En 23 partidos de playoffs que casi igualó ese total, anotando 17 puntos. Pero ninguno ha sido más importante que gol del empate del Bickell en sexto y último partido.

Defensivamente, Chicago hizo lo suficiente para salir adelante. Sin ser una defensa perfecta, pero han sido sólidos cuando se les necesitaba, por ejemplo, en el Game 5 y el Game 6. Después de un Game 4 que defensivamente fue destrozado varias veces, Los Blackhawks hicieron mejoras y redujeron las oportunidades de Boston.

Porteria, era el gran interrogante para los Blackhawks de cara a los playoffs. Si bien hubo algunos momentos inestables, Corey Crawford hizo su trabajo. Terminó los playoffs con un récord de 16-7-2 y 1.84 GAA y un porcentaje 0.932. Crawford fue vapuleado en el Game 4, pero mostró gran determinación mental y se recuperó a lo grande para el Game 5 y el Game 6.

Con esto, podemos cerrar oficialmente la temporada 2013. El título de Chicago es totalmente merecido por su total dominio a lo largo de toda la temporada. Felicitaciones a los Blackhawks y sus fans.

¡Ya queda menos para la Temporada 2013-14!